lunes, 30 de abril de 2012

Orejeras

La función básica de las orejeras es cubrir el oído externo con un cuenco que forma un cierre acústico atenuador del ruido. La forma del cuenco y el tipo de almohadillado y la tensión del arnés de cabeza de sujeción son los factores que determinan en un grado mayor la eficacia con que las orejeras atenúan el ruido ambiental. La Figura 31.12 ilustra una orejera bien ajustada con buen cierre en todo el perímetro del pabellón auditivo y otra con una fuga bajo la almohadilla. El gráfico incluido en la misma figura muestra que, mientras que la orejera bien adaptada proporciona buena atenuación a todas las frecuencias, la mal adaptada no produce prácticamente ninguna atenuación de las frecuencias bajas. Casi todas las orejeras proporcionan una atenuación que se acerca a la conducción ósea, de aproximadamente 40 dB, para frecuencias de 2.000 Hz o superiores. La capacidad de atenuación de bajas frecuencias de unas orejeras bien ajustadas está determinada por factores de diseño y materiales, como el volumen del cuenco, la superficie de la abertura del cuenco, la presión del arnés de cabeza o el peso.

domingo, 29 de abril de 2012

Efecto sobre la comunicación

Debido al efecto de oclusión que causan la mayor parte de los protectores auditivos, la propia voz tiende a sonar más fuerte (como los protectores reducen el ruido ambiental, la voz suena más alta que cuando se desprotegen los oídos). Para adaptarse al mayor volumen de su propia voz, casi todos los usuarios tienden a bajarla considerablemente. Bajar la voz en un medio ruidoso donde el interlocutor lleva también protectores auditivos contri- buye a dificultar la comunicación. Además, incluso sin efecto de oclusión, casi todos los usuarios elevan la voz en sólo5a6 dB por cada 10 dB de aumento del ruido ambiental (efecto Lombard). Por tanto, la combinación de voz más baja a consecuencia del uso de protectores auditivos y de una elevación insuficiente para compensar el ruido ambiental afecta gravemente a la capacidad de los usuarios de protectores auditivos para escucharse y enten- derse en ambientes ruidosos.

sábado, 28 de abril de 2012

Inspección sobre el terreno (II)

Además de las preguntas que se indican en la Figura 30.5,

deben formularse otras que pongan de manifiesto lo que no es inmediatamente obvio, por ejemplo:
1. Tareas no rutinarias y calendario de las actividades de mantenimiento y limpieza.
2. Cambios recientes en los procesos y sustituciones químicas.
3. Cambios físicos recientes en el medio ambiente de trabajo.
4. Cambios en las funciones de los puestos de trabajo.
5. Renovaciones y reparaciones recientes.

Las tareas no rutinarias pueden producir importantes exposiciones pico a sustancias químicas, que son difíciles de predecir y medir durante una jornada laboral normal. Los cambios en los procesos y las sustituciones químicas pueden alterar la emisión de sustancias al aire e influir en la exposición consiguiente. Los cambios en la distribución física de una zona de trabajo pueden alterar la eficacia de un sistema de ventilación. Los cambios en las funciones de los puestos de trabajo pueden determinar que algunas tareas sean realizadas por trabajadores sin experiencia en condiciones de mayor exposición. Las renovaciones y reparaciones pueden introducir en el medio ambiente de trabajo nuevos materiales y sustancias químicas que liberen compuestos químicos volátiles o irritantes.

viernes, 27 de abril de 2012

Inspección sobre el terreno (I)

La finalidad del estudio inicial, llamado inspección sobre el terreno, es recoger información de manera sistemática para juzgar si existe una situación potencialmente peligrosa y si es necesario realizar mediciones. El higienista industrial comienza la inspección sobre el terreno con una reunión inicial a la que pueden asistir representantes de la dirección, trabajadores, super- visores, enfermeros de empresa y delegados sindicales. Los higie- nistas industriales pueden influir mucho en el éxito del estudio y en cualquier medición posterior, creando un equipo de personas que se comuniquen libre y sinceramente entre sí y comprendan los objetivos y el ámbito de la inspección. Los trabajadores deben participar y estar informados de la inspección desde el principio para que la cooperación, y no el miedo, presida la investigación.
En la reunión, se solicitan diagramas de los procesos, planos de la fábrica, informes sobre inspecciones ambientales realizadas en el pasado, programas de producción, calendarios de manteni- miento de los equipos, documentación sobre los programas de protección personal y estadísticas sobre el número de trabaja- dores, los turnos y las quejas relacionadas con la salud. Todos los materiales peligrosos utilizados y producidos en las operaciones se identifican y cuantifican. Se elabora un inventario químico de productos, subproductos, productos intermedios e impurezas y se consultan todas las fichas toxicológicas de los materiales. Se anotan los calendarios de mantenimiento de los equipos, su edad
y su estado, porque el uso de equipos antiguos puede incrementar las exposiciones debido a la falta de controles.
Después de la reunión, el higienista industrial realiza una inspección visual del lugar de trabajo, observando las opera- ciones y los métodos de trabajo, con el objetivo de identificar posibles contaminantes laborales, valorar el potencial de exposi- ción, identificar la vía de exposición y estimar su duración y su frecuencia. En la Figura 30.4. se ofrecen ejemplos de contaminantes laborales. Esta inspección sobre el terreno sirve al higienista industrial para observar el lugar de trabajo y responder algunas preguntas. En la Figura 30 5 se ofrecen ejemplos de observaciones y preguntas.

jueves, 26 de abril de 2012

Vías de exposición (II)

La absorción de sustancias químicas a través de la piel es importante, sobre todo cuando existe un contacto directo por salpicadura, aspersión, humedecimiento o inmersión con hidrocarburos liposolubles y otros disolventes orgánicos. La inmersión incluye el contacto corporal con prendas contaminadas, el contacto de las manos con guantes contaminados y el contacto de manos y brazos con líquidos a granel. En el caso de algunas sustancias, como las aminas y los fenoles, la absorción a través de la piel puede ser tan rápida como la absorción de las sustancias inhaladas a través de los pulmones. Para algunos contaminantes, como los pesticidas y los tintes derivados de la bencidina, la absorción a través de la piel es la principal vía de entrada al organismo, mientras que la inhalación es una vía secundaria. Estas sustancias químicas pueden penetrar fácilmente en el orga- nismo a través de la piel, acumularse allí y causar daños sistémicos. Cuando las reacciones alérgicas o los sucesivos lavados resecan y agrietan la piel, aumenta radicalmente el número y el tipo de sustancias químicas que pueden ser absor- bidas por el organismo. La ingestión, una vía poco común de absorción de gases y vapores, puede ser importante para partí- culas como el plomo. La ingestión puede producirse al comer alimentos contaminados, al comer o fumar con las manos contaminadas y al toser y después tragar partículas inhaladas.
La inyección de materiales directamente en la corriente sanguínea se produce, por ejemplo, cuando los trabajadores sanitarios de los hospitales se pinchan sin querer la piel con agujas hipodérmicas, o cuando fuentes de alta presión liberan a gran velocidad proyectiles que contactan directamente con la piel. Las pistolas de pintura con bomba y los sistemas hidráulicos tienen una presión lo suficientemente elevada para perforar la piel e introducir sustancias directamente en el organismo.

miércoles, 25 de abril de 2012

Vías de exposición (I)

La sola presencia de contaminantes laborales en el lugar de trabajo no implica necesariamente que exista un potencial signifi- cativo de exposición; el agente debe llegar al trabajador. En el caso de las sustancias químicas, la forma líquida o vaporizada del agente debe estar en contacto con el organismo, o ser absorbido por él, para producir un efecto nocivo en la salud. Si el agente está aislado en un recinto cerrado o es capturado por un sistema de ventilación localizada, el potencial de exposición será pequeño, con independencia de la toxicidad propia de la sustancia química.
La vía de exposición puede influir en el tipo de controles realizados y en el riesgo potencial. En el caso de los agentes químicos y biológicos, los trabajadores pueden estar expuestos a ellos por inhalación, contacto de la piel, ingestión e inyección; las vías más comunes de absorción en el medio ambiente de trabajo son el tracto respiratorio y la piel. Para valorar la inhalación, el higienista industrial debe observar la posibilidad de que las sustancias químicas queden suspendidas en el aire en forma de gases, vapores, polvo, humo o niebla.


martes, 24 de abril de 2012

Vigilancia ambiental y biológica

La vigilancia ambiental y biológica comienza con un estudio de higiene industrial del medio ambiente de trabajo para identificar posibles riesgos y fuentes contaminantes y establecer la necesidad de realizar mediciones. En el caso de los agentes químicos, éstas pueden requerir la toma de muestras del aire, de superficies, de productos a granel y de materiales biológicos. En el caso de los agentes físicos, puede incluir mediciones del ruido, la temperatura y la radiación. Cuando está indicado realizar mediciones, el higienista industrial debe desarrollar una estrategia de muestreo que especifique los trabajadores, procesos, equipos y zonas de los que deben tomarse muestras, el número de muestras, la duración y frecuencia del muestreo y el método del mismo. Los estudios de higiene industrial varían en complejidad y enfoque dependiendo del objetivo de la investigación, el tipo y el tamaño del lugar de trabajo, y la naturaleza del problema. No existen fórmulas rígidas para realizar los estudios; sin embargo, una preparación rigurosa antes de iniciar la inspección aumenta su eficacia y eficiencia. Las investigaciones que están motivadas por quejas y enfermedades de los trabajadores tienen la finalidad adicional de descubrir la causa de los problemas de salud. Los estudios de la calidad del aire interior se centran en las fuentes contaminantes tanto interiores como exteriores. Con independencia del riesgo profesional el método general para estudiar y tomar muestras en el lugar de trabajo es similar; por consiguiente, en este capítulo se utilizarán los agentes químicos como modelo para la metodología.